En el mundo de las bicicletas, las innovaciones tecnológicas no fueron excesivas durante muchos años. No obstante, el furor por las bicicletas de montaña dio un empujón a salir de lo tradicional y demostrar que la evolución del ciclismo sigue andando.

Antiguamente, solo existía un diámetro de llanta disponible, la de 26″, pero, hoy en día, las posibilidades que tienen los ciclistas para elegir se han ampliado hasta tener 3 tamaños importantes: 26″, 27.5″ y 29. Si recién vas a empezar, cualquiera de estos modelos de llantas para bicicleta te servirá y la decisión dependerá más por el presupuesto que manejes. Sin embargo, actualmente, los fabricantes han decidido sustituir los aros 26″ por las 27.5″, dejando por el momento la medida más pequeñas para las gamas bajas.

El tamaño ideal para una modalidad de ciclismo de montaña

Las llantas 27.5″, cuya medida real es de 21,1″; se han popularizado con ese nombre al ser una medida intermedia entre 26″ y 29″. Este diámetro se maneja más ágilmente y las bicicletas son más reactivas en senderos revirados, peraltes y en saltos se conducen con soltura.  Es por ello que los amantes del downhill o enduro prefieren este tipo de llantas en sus bicicletas de montaña.

Las llantas de 29″ son más usadas para deportes como el rally XC o maratón. A pesar de ser algo lentas en aceleración, ganan una gran velocidad máxima, de avanzada y son más estables. El mayor diámetro hace que el ataque a los obstáculos sea mejor, por lo que su reacción a escalones o terrenos rotos y bacheados es muy buena. A mayor medida del diámetro de la rueda, mayor la superficie de contacto y, con ello, de tracción, agarre y frenada. Por contra, su flexión es proporcional a su mayor tamaño.